La manzana es una de esas frutas que además de ser deliciosa cuenta con todo tipo de ventajas para la salud y el bienestar, es así como la dieta de la manzana se constituye como una alternativa más cuando se trata de seleccionar una dieta rápida que permita bajar de peso fácilmente y en la que no se tenga que invertir demasiado tiempo para llegar a la meta.
Al comer manzana, cumpliendo ciertas indicaciones, no sólo te pondrás en forma, tendrás un mayor aporte de vitaminas y fibra, además de una excelente digestión. Podrás controlar los triglicéridos, el colesterol, la gastritis y hasta la ansiedad, convirtiéndose en un producto que definitivamente no debería faltar dentro de cualquier tipo de dieta.
Esta dieta para adelgazar está pensada para tener una duración de 7 días, y es importante que sigas las indicaciones para que no se altere tu salud en forma negativa.
Lo primero es empezar el día tomando en ayunas un té de manzana, espera por lo menos media hora antes de consumir el desayuno que es una taza de avena con una manzana en tajadas o cubitos.
Para el almuerzo acompaña un plato de vegetales frescos con una porción de pollo a la plancha y bebe agua tibia. Deja que pasen unos 30 minutos y come una manzana con su cáscara.
En la media tarde te comes otra manzana y para la cena puedes optar por leche descremada con cereal integral o una ensalada verde con todas las manzanas que se te antojen.
Quizás el gran punto a favor de la manzana es que produce una interesante sensación de saciedad, por lo que resulta muy adecuada cuando se trata de controlar y minimizar porciones y número de veces que se come durante el día. Un buen plan de ejercicio es una medida de apoyo para que este método funcione aún mejor.
