Las hemorroides son una de las enfermedades más difíciles y desagradables del recto. Por desgracia, muchas personas padecen de este mal, especialmente después de los 40 años. El estilo de vida sedentario, la elección de malos hábitos alimentarios, el consumo de comida rápida, las bebidas alcohólicas y el tabaquismo, contribuyen a la aparición de esta enfermedad. Pero quizás te estés preguntando cómo saber si tengo hemorroides, aquí te enseñamos.
Los síntomas principales de las hemorroides son la picazón y la sensación de ardor en el ano. Sin embargo, las hemorroides no son la única dolencia acompañada de síntomas similares.
Sin ir a una clínica especializada, es muy fácil confundirse y, por consiguiente, diagnosticar mal la enfermedad. Entonces, para saber qué tipo de problema estás enfrentando, necesitas conocer los síntomas principales y el curso de las hemorroides.
¿Cómo comienza la enfermedad?
Las hemorroides son una enfermedad insidiosa que no siempre es fácil de detectar. A menudo, durante un tiempo determinado, la enfermedad procede en secreto y no aparece en el exterior. A pesar de que una persona ya tiene una patología, puede permanecer en la oscuridad durante mucho tiempo. A menudo sucede que la enfermedad se hace sentir por aguda irritación.
Además de los síntomas conocidos, comezón y ardor en el área anal, puede haber inflamación o hemorragia. En tales situaciones, debes contactar inmediatamente a un médico. Retrasar la visita a un especialista puede tener consecuencias negativas.
Pero, ¿cómo saber si tengo hemorroides? Después de todo, si logras comprender esto a tiempo y comenzar la terapia, evitarás complicaciones graves. Cuando aparecen los primeros síntomas de hemorroides debes consultar inmediatamente a un especialista.
Prueba de la presencia de hemorroides
Debido a que las hemorroides no siempre se manifiestan en las etapas primarias de su desarrollo, es difícil identificar la enfermedad en el hogar. Especialmente si no estás bien versado en esta área.
Pero hay una prueba simple que te ayudará a descubrir si padeces de hemorroides. Desafortunadamente, las hemorroides latentes no son infrecuentes y ocurren con bastante frecuencia. Da respuestas a estas preguntas sencillas y si sospechas que tienes un problema, planifica una consulta con un médico especialista.
Preguntas:
- ¿Tienes picazón y sensación de ardor en el pasaje anal?
- ¿Sucede que sientes plenitud en el recto, aunque no quieras ir al baño?
- ¿Sufres de estreñimiento?
- ¿Ves periódicamente sangre en las heces?
- ¿Alguna vez encontraste un sello incomprensible en tu región anal?
- ¿Necesitas una visita al baño por más de 5 minutos?
- ¿Tienes venas varicosas en las piernas?
Responda las preguntas con “sí” o “no”. Para saber si tienes un problema, calcula cuántas respuestas positivas obtuviste al final.
Respuestas
- 0 a 1 respuestas positivas: No tienes que preocuparte, nada indica la presencia de la enfermedad.
- 2 a 3 respuestas positivas: Este resultado plantea algunas preocupaciones sobre tu salud, hay una cierta posibilidad de tener hemorroides.
- Más de 4 respuestas positivas: Necesitas un examen médico y asesoramiento calificado, ya que es posible que la enfermedad esté presente.
Sin lugar a dudas, el problema de este tipo de enfermedades es muy delicado y requiere un enfoque especial. Después de todo, no es fácil para todos hablar de cosas tan íntimas. Pero no hay nada peor que posponer una visita a un médico cuando sea necesario, y luego sufrir un agravamiento del curso de la enfermedad.
Hemorroides en jóvenes
Un peligro especial es que los jóvenes sufren a causa de esta enfermedad. Afecta a más y más jóvenes, adolescentes, e incluso hay casos en que los niños sufren de hemorroides.
En la adolescencia, las hemorroides se pueden identificar a partir de aproximadamente los 13-14 años de edad. Como regla, esta enfermedad tiene tres etapas:
- Primera etapa. Hay una pequeña hinchazón y sensibilidad. Pero los adolescentes no siempre prestan la debida atención a su bienestar. Así, si experimentan algunos problemas, rara vez se lo dicen a los padres y a otros adultos.
- Segunda etapa. Aumento del edema y la presencia de dolor intenso cuando toca el nodo hemorroidal. Muy a menudo, este dolor se manifiesta cuando se sientan o al caminar.
- Tercera etapa. Puede haber mucha hinchazón, inflamación de los tejidos, dolor al tocar, también es posible la presencia de trombosis hemorroidal externa.
La determinación de la enfermedad en el hogar no siempre es posible. Es importante explicarle al niño que el médico debe tratarle lo antes posible. Necesitas decir no a tus miedos, ya que no hay nada de qué temer o de qué avergonzarse. Es improbable que la autogestión del problema funcione, y el especialista dirá qué hacer.